Te diría

Aquí está tu cepillo de dientes, derrotado ante una nueva despedida inevitable. Un poco como yo, te diría. 

Permanece tal y como lo dejaste, aguardando a que seas tú quien haga que vuelva a tener sentido su existencia, pero seré yo quien dé el próximo paso y lo guarde en el lugar en el que los objetos esperan. Igual que espero yo, te diría.

Realmente te diría lo que hiciera falta para que no volvieras a tener que marcharte y me desahuciaras para siempre del lugar donde esperamos a que vuelvas, eso te diría.