Acordes de presente

Hay momentos en la vida en que te convences de que el destino te tiene preparado algo grande. Que tantos pequeños grises desafinados no son más que la antesala del concierto de una gran orquesta estallando en perfecto y armonioso éxtasis para ti. Y, de pronto, sin esperarlo y sin llamar, la sordera más absoluta tinta la mirilla a través de la cual te relamías espiando esa ilusión. 

Sólo tengo una cosa que decirte: Retírate los tapones, la más grande de las sinfonías ya está sonando para ti, eres el único culpable de no impregnar el asfalto que pisas con su música.

Comentarios

  1. No recuerdo haberte leído post en el que no hablases de sentimientos.
    Deseo, petición... Creo que empieza a arder la ilusión ;-)

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    Respuestas
    1. Hablo de sentimientos propios, de sentimientos de otros, de sentimientos que imagino... es lo que suele hacer que arranque a escribir :)

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  2. No sé hasta qué punto matizas la diferencia entre los sentimientos que imaginas y los deseos o lo deseado.
    Sobre todo en alguien que como tú, para bien o para mal, parece que aún no ha construido esa coraza que desarrollamos con la construcción de nuestro pasado. Esas historias personales que empezamos desnudos para sentirlas y acabamos tan heridos que juramos no volver a confiar en el sexo opuesto; hasta que aparece esa otra nueva persona excepcional. Hemos nacido para tropezarnos (y levantarnos).

    En cualquier caso, con todo el margen de error del desconocimiento personal, creo que ahora estás ilusionada. Y eso es nuestro mayor estimulante vital.
    (aquí va tu sonrisa) :-D

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