Más


Más cerca. 

Más minutos, más menos kilómetros, más menos lejos.
Más noches arrugadas, más palos de ciego.
Más manos, más piel, más locos los besos.

Se echaron más que nunca de menos.





Oh la boca mordida, oh los besados miembros, 
oh los hambrientos dientes, oh los cuerpos trenzados.

Oh la cópula loca de esperanza y esfuerzo 
en que nos anudamos y nos desesperamos.

Y la ternura, leve como el agua y la harina. 
Y la palabra apenas comenzada en los labios.

Ése fue mi destino y en él viajó mi anhelo, 
y en él cayó mi anhelo, ¡todo en ti fue naufragio!

Pablo Neruda, La canción desesperada


Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares